Publicado el 16/12/2025
ProChile realizó la IV versión de la Distinción Mujer Exporta, donde 16 mujeres chilenas exportadoras o con potencial exportador fueron reconocidas por el trabajo que realizan en las regiones a las que representan y la importancia en el proceso de internacionalización.
La actividad, que se llevó a cabo en el marco del Encuentro Empresarial Arica y Parinacota 2025, fue encabezada por la Directora General (S) de ProChile, Paulina Valderrama, quien estuvo acompañada de la Directora Nacional de ProChile, Lorena Sepúlveda. Ambas fueron las encargadas de entregar el premio a la empresaria Daniela Campillay, creadora de Enfusión Té y Bienestar, quien ha desarrollado sus productos pensando en la mujer y los procesos de cambios que ellas manifiestan tanto en su vida fértil, como en la menopausia y que con el apoyo de ProChile ha exportado a mercados como Colombia y próximamente a México y Costa Rica.
“A través de este reconocimiento, ProChile reafirma su compromiso con la equidad de género en el comercio internacional, visibilizando y valorando el aporte de las empresas lideradas por mujeres al desarrollo del país. Su trabajo y liderazgo nos empujan a seguir construyendo un Chile que exporta no solo productos, sino también valores, talento y compromiso con un futuro mejor", señaló la Directora General (S), Paulina Valderrama.
La distinción es parte del Programa Mujer Exporta, iniciativa que busca acompañar empresas lideradas por mujeres en su camino a la internacionalización, basada en las categorías correspondientes a los objetivos de desarrollo sostenible 2030 propuestos por la Organización de Naciones Unidas. A 2024 el programa suma 745 usuarias.
En “Enfusión Té y Bienestar”, Daniela Campillay ha desarrollado productos con una variada gama de sabores, aromas, y pertinencia de uso para cada ocasión. Su espíritu innovador comenzó en una pequeña oficina y con el tiempo se transformó en una gran planta.
“Este reconocimiento es profundamente significativo. Como pyme que ha trabajado intensamente en innovar, automatizar procesos y mejorar nuestra capacidad productiva, recibir el premio Mujer Exporta de la Región de Valparaíso es un orgullo enorme. Nos emociona representar a nuestra región a nivel nacional, porque detrás de este logro hay esfuerzo, aprendizaje y un equipo comprometido. Lo que más destaco, es que este premio pone en valor el trabajo de mujeres liderando empresas, impulsando innovación local y abriendo oportunidades para que productos hechos en nuestra región lleguen al mundo”, comentó Daniela Campillay.
Para Ivo Sandoval, director regional de ProChile Valparaíso, “esta distinción busca relevar el trabajo de Daniela. Ella ha desarrollado una propuesta muy interesante y que ya está conquistando distintos mercados en Latinoamérica. Su ejemplo esperamos que motive a otras empresarias y productoras de la región que estén interesadas en llegar con sus ideas y productos más allá de nuestras fronteras, nosotros estamos para apoyarlas”.
Respecto al trabajo junto a ProChile, Daniela señala que “para una pyme como la nuestra, dedicada a elaborar infusiones en nuestra propia fábrica, el trabajo de ProChile ha sido clave para abrirnos camino hacia la internacionalización. Su apoyo nos ha permitido entender mejor los mercados, profesionalizar procesos y validar que nuestro producto tiene potencial fuera de Chile. Además, nos han entregado herramientas concretas para desarrollar capacidades exportadoras, algo que para empresas pequeñas marca una diferencia enorme. Gracias a su acompañamiento hemos podido avanzar con mayor claridad, confianza e información en este camino”.
A quienes aún no se atreven a exportar, Daniela les diría que “den el paso, incluso si sienten que todavía no están totalmente listos. Exportar es un desafío, pero también es una oportunidad enorme para crecer, aprender y posicionar un producto más allá de las fronteras. Como pyme sabemos que no es fácil, pero con el apoyo de instituciones como ProChile el proceso se vuelve accesible y acompañado. No se necesita tener todo perfecto desde el principio: lo importante es comenzar, preguntar, asesorarse y confiar en el valor de lo que uno hace. El mundo sí está abierto para productos hechos con dedicación, innovación y origen local”, finaliza.