Publicado el 20/04/2022
Con el propósito de entregar un análisis profesional de la situación actual del comercio internacional, con énfasis en aspectos macroeconómicos, logísticos y financieros, nacional e internacionalmente; y además, entregar tendencias para el corto y mediano plazo; ProChile, en colaboración con Coface, Agunsa y Banco Estado, organizó el taller “Desafíos para el Comercio Exterior: Perspectivas logísticas y Financieras”.
La actividad, realizada vía streaming a través de la plataforma Go To Webinar, reunió a 125 representantes de diversas empresas nacionales de diferentes tamaños y sectores productivos del país y contó con la destacada participación de Rodrigo Salas, CEO de Coface; Sebastián Santa Cruz, Gerente Corporativo de Agenciamiento y Representaciones de Agunsa y de Christian Hurtado, Economista Jefe de Banco Estado. En su intervención, el Country Manager de Coface, Rodrigo Salas, profundizó en los efectos del conflicto entre Rusia y Ucrania y cómo éste afectará a las empresas a través del bajo crecimiento y la inflación. Desde su perspectiva, los mercados latinoamericanos no están tan expuestos como los países europeos, pero de todos modos sentirán alguna afectación. En ese sentido, apuntó a la diversificación y a la flexibilidad de las empresas nacionales para buscar nuevos compradores, reaccionar rápido y así limitar la exposición a los impactos negativos del conflicto.
A su turno, y desde el punto de vista logístico, el Gerente Corporativo de Agenciamiento y Representaciones de Agunsa, Sebastián Santa Cruz, habló de la “Tormenta Perfecta” por la que atraviesa el sector después de dos años de pandemia a los que se suman el conflicto bélico. El experto ejemplificó con casos como el atochamiento de naves en los puertos chinos y la escasez de choferes de camiones en Estados Unidos para explicar las alzas en los transportes marítimos. A su juicio, estos precios tocaron techo durante el año 2021 y aunque no se visualiza que los precios vuelvan a los niveles de hace tres o cuatro años atrás, las alzas de precios de fletes más que obedecer a razones de costos de insumos (energéticos, por ejemplo) se deben a razones relacionadas con la oferta y la demanda, y a la concentración de la oferta de la industria naviera global.